La sociedad japonesa se caracteriza por las relaciones sociales formales y el respeto por la jerarquía. Los roles de género siguen siendo bastante tradicionales, con las mujeres a menudo ocupadas en tareas domésticas y los hombres ocupados en tareas profesionales. Sin embargo, esto tiende a cambiar con la creciente participación de las mujeres en la fuerza laboral y el cambio de las normas sociales.
Las ocupaciones más comunes en Japón incluyen profesiones de servicios, industrias tecnológicas y manufactureras y sectores de alto crecimiento, pero no hay que olvidar que Japón también es famoso por sus artesanías tradicionales y locales como la alfarería, la seda, la laca, los esmaltes, la cerámica, los textiles. , papel, juguetes, etc. Estos oficios suelen transmitirse de generación en generación y tienen una gran trascendencia cultural para el país. Los artesanos locales suelen ser muy valorados por su destreza y capacidad para perpetuar las tradiciones culturales japonesas.
La vida familiar es muy importante en Japón, y es común que los adultos vivan con sus padres hasta que se casan. Los niños se crían en una cultura de respeto y disciplina, y es común inscribirlos en actividades extracurriculares como artes marciales o clases de música para reforzar su desarrollo personal.
Japón también es conocido por su respeto por la tradición y la cultura, que todavía está presente en la vida cotidiana. Es común celebrar fiestas tradicionales como el Año Nuevo y el Festival de Primavera, así como participar en ceremonias como el té tradicional o la ceremonia de boda japonesa.
En suma, la sociedad japonesa está marcada por relaciones sociales formales, roles de género tradicionales, una importante vida familiar y una fuerte presencia de la tradición y la cultura en la vida cotidiana. Las profesiones son variadas y pueden estar vinculadas a sectores empresariales tradicionales oa sectores de rápido crecimiento del futuro. Japón es un país innovador y hay muchas oportunidades profesionales allí.